360 grados agencia editorial

¿Qué estamos haciendo como población para enfrentar al coronavirus (COVID-19)?

En México a finales de febrero se confirmó el primer caso de COVID-19, lo cual desencadenó diversas reacciones entre la población, mientras que la Secretaría de Salud emitía los primeros reportes sobre cómo se estaba actuando y cuales serían los protocolos por seguir.

Este nuevo virus posee la característica de tener una transmisión muy rápida, lo cual se mide basándose en el número reproductivo básico, número que nos permite conocer qué tan rápido se extiende la infección en una población durante su período inicial.

Entonces, para este nuevo coronavirus sabemos que es de 1.5 a 4, lo que significa que por cada persona con el virus pueden contraerlo 1.5 a 4 personas más.

De acuerdo con los modelos matemáticos para el escenario actual de México, se estima que la propagación de la enfermedad es algo inevitable y según las estimaciones el brote infeccioso se daría entre el 20 y el 30 de marzo. Lo que significa que entre esas fechas los contagios domésticos, es decir dentro de México, comenzarán a elevarse.

Si bien el gobierno insiste repetidamente en que está preparado frente al coronavirus, pese a que sus propias previsiones reconocen un alto número de casos que consideran inevitables.

Se ha criticado ampliamente que es hasta el día de hoy que comienzan a cancelarse algunos eventos masivos; y que ni siquiera en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se cuenta por el momento con alguna acción preventiva, pese a que sería muy fácil instrumentar medidas simples como, de inicio, proveer gel sanitizante en para que las personas se froten las manos antes de salir o entrar no solo del aeropuerto sino de cualquier otro espacio o transporte público.

Quizá, de momento, solo esto tenga mayor impacto que bloquear todo un vuelo proveniente de Europa o de China.

Lo que sí podemos y debemos hacer es: tomar una medida de distanciamiento social evitando los saludos con besos o abrazos, evitar lugares concurridos, no esperar a que el gobierno nos prohíba todos los eventos y lugares públicos. México tiene la experiencia de 2009 con la pandemia de Influenza, y como población colaboremos a que el impacto del COVID-19 sea menor.

Recomendaciones

Es importante fortalecer la práctica de acciones para el cuidado de la salud y así evitar el contagio de enfermedades respiratorias, como las que a continuación se enuncian:

  • Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o utilizar gel con base de alcohol al 70%.
  • Al toser o estornudar, utilizar el estornudo de etiqueta, que consiste en cubrirse la nariz y boca con un pañuelo desechable o con el ángulo interno del brazo.
  • No tocarse la cara, la nariz, la boca y los ojos con las manos sucias.
  • Limpiar y desinfectar superficies y objetos de uso común en: casas, oficinas, sitios cerrados, transporte, centros de reunión, etc.
  • Quedarse en casa cuando se tienen padecimientos respiratorios y acudir al médico si se presenta alguno de los síntomas (fiebre mayor a 38°C, dolor de cabeza, dolor de garganta, escurrimiento nasal, etc.)

Lo que se busca con esta estrategia es disminuir la velocidad a la que llegan los nuevos casos a los hospitales, aliviando la carga de atención médica y mejorando las probabilidades de que los pacientes individuales reciban mejor atención, incluso si el número de casos totales no disminuye. No es lo mismo 100 casos en 2 días que en 2 semanas.

Revisemos fuentes oficiales de la Secretaría de Salud, sigamos las indicaciones muy al pie de la letra y evitemos difundir información que solo genera reacciones como compras de pánico y más desinformación.

Dr. Daniel Velázquez Cortés
Maestro en Salud Global – Universidad de Barcelona
Médico Cirujano – Universidad Veracruzana